Una de las cosas que trae el crecer es el enamoramiento, esa necesidad de tener a alguien cerca, de abrazarla, de besarla, de olerla, de salir a pasear, de caminar por primera vez con alguien de la mano, de sentir el primer amor y ser dueño del mundo. Un inexperto no guarda nada y muestra sus sentimientos sin medir las consecuencias. Automáticamente sabes que creciste cuando sientes que alguien te atrae, que alguien te gusta, dejas de comportarte como un niño y adoptas nuevas actitudes que marcan un antes y un después en tu vida. Tratas de ser sutil pero es imposible, eres muy obvio a los ojos de tu familia ya que son las personas que más te conocen. Todos los hombres hemos pasado por esto, yo lo pasé y lo disfruté, así que estoy seguro que seré certero en todo lo que escriba.
Por ejemplo te bañas muchísimo más seguido, incluso más de una vez al día, empiezas a entender el sentido de usar un buen perfume y botas todos los de niños con etiquetas de Naruto, Ben 10 o Angry Birds y le exiges a mamá que te compre uno elegante, uno de grandes. Te peinas a cada rato, te revisas la cara por si aparece alguna imperfección en ella que pueda arruinar tu día. Practicas cambios de look, pero ojo que los más varoniles, los de macho. De tanto mirarte al espejo notas que estas realmente muy flacucho y empiezas a tratar de sacar músculos de donde no hay, sacas pecho, levantas hombros, escondes panza, inflas cachetes, muestras brazos y mueres al darte cuenta que tus bíceps, tríceps y demás son los de un niño de 6 en un cuerpo de 13, deprimido te propones hacer 10 lagartijas diarias de hoy en adelante. Te cambias de ropa casi diario y le tomas verdadero interés a su combinación correcta y que no esté desgastada ni sucia. Limpias tus zapatos a cada hora y botas todos los calcetines que no te gustan o que no tienen el par completo. Buscas en internet el lado correcto del reloj y este, aclarando, tiene que ser el más grande y ostentoso de tu colección, en estos casos un reloj pequeño y elegante esta absolutamente descartado. Te acabas la pasta dental en menos de 2 semanas por exagerar con el cepillado (calculo que 5 o 6 veces diarias es poco). Te dejas crecer el cabello, y si tendrías barba también la dejarías crecer hasta parecerte un musulmán abandonado en algún desierto lejano, crees que eso te da un poco de estilo, agudeza y misterio. Practicas saludos en el espejo, practicas posturas, practicas miradas, incluso gestos y hasta formas de besar; luego de foguearte en el asunto de los besos en el espejo vas con la almohada, ella es la primera víctima oficial de tus desvaríos de púber, después de practicar mucho y de hacer tu mejor mejor mejor esfuerzo con ella (ojo, son 3 "mejor" seguidos), por fin la dejas tranquila y buscas la ocasión para besar, ahora sí, a alguna incauta de tu edad, lo cual será tu primer beso y estas convencido, después del sacrificado esfuerzo y tu amplia experiencia con tu almohada, que será decente, dentro de tus posibilidades.
Luego de que tu imagen sea la adecuada, llega el turno de las primeras cartas, jamás por correo ni Facebook, tiene que ser carta escrita, hecha, perfumada y sacramentada por tu propia mano virgen. Piensas las cosas y ves la realidad de tu caligrafía y ortografía, y de lo triunfalmente ridículas que pueden llegar a ser; para disimular un poco optas por comprar algunos stickers de Garfield y Odie o Snoopy y Woodstock (definitivamente con estos no hay pierde, estos nunca pasarán de moda), pero si se es más arriesgado y rebelde comprarás algo de Mickey y Minnie Mouse o de Pucca y Garu; luego llenarás con muchos detalles la hoja de color personalizado que compraste regateando en la librería más cercana, te pasarás más de 2 horas decidiendo el lugar correcto de cada uno y otras dos horas más en lo que llevará escrito, el lugar exacto para ello y el tipo de letra que usarás, tarea muy complicada si eres un perfeccionista compulsivo amante del arte y el buen gusto.
Luego de superar el impase de la carta llega uno peor, el primer regalo, y este es de preocupación porque para empezar eres un niño de 13 años que es un absoluto parásito en casa y no tienes los medios para conseguir una cantidad decente de dinero para comprar algo, otro gran problema es que tu posible enamorada ya tiene experiencia en estos asuntos y sabe reconocer muy bien la marca de los mejores peluches hipoalergénicos para niños, como el By Presents o Disney o Budsies, además de eso sabe su precio, única tienda en donde las venden y hasta su mami es íntima amiga de la dueña de la tienda. En pocas palabras, no hay salida. Algún osado pensará en la remota posibilidad de darle algún perfume y luego de preguntarle, muy sutilmente claro, cuál le gustaría recibir como regalo, ella muy amablemente le contesta que un Chanel n5 estaría perfecto, el pavazo suelta una sonrisa y jura conseguirlo para ella; llega a casa directo a googlear "chanel n5 precio" y llora por 15 minutos desconsoladamente al darse cuenta de que su realidad financiera es patética y, en definitiva, descarta la posibilidad de regalarle algo así. Entonces llega el momento de la verdad y eliges a un peluche feo, pequeño y de malísima calidad, sin importarte el amplio conocimiento que tu chica tiene sobre peluches caros, y es más, ella lo ve con sorpresa, con agrado y hasta con ternura, es tan feo y barato pero bueno, debe ser algo muy significativo para él piensa ella, mientras tú avergonzado te quedas en silencio.
Después de superar todas esas situaciones llega por fin lo más importante, la primera salida (y arranca la masacre), supongamos que pactas una cita con tu chica, tú muy enamorado y ella dudando, como que sí o no, como que aceptando que tú eres el único en la lista de afane y no le queda otra opción. Tus esperanzas de que acepte son prácticamente nulas, pero te guías, como el gran mongo que eres, de ciertos coqueteos iniciados por ti y tímidamente correspondidos por ella, pero sin una muestra clara de que en verdad quiere algo contigo, al final eres optimista y aún así decides ir con todo. Este es un territorio nuevo y decides ir con cuidado, decides ser sutil, precavido y paciente para saber identificar el momento preciso en que tienes que lanzarle la invitación. Piensas que debes esperar unos cuantos días, tal vez semanas, o incluso meses para estar totalmente seguro, para que poco a poco ella sienta que tú estás interesado y que la oportunidad se presente sola. Pasan dos días y la encuentras en misa con su mamá, su tío gruñón que es catequista y su hermanita menor que, posiblemente, es la única que te mira con cierto agrado y condescendencia. Olvidándote todo eso de ser precavido y demás babosada vas directo, esquivas a dos señores mayores, pasas por el centro de una reunión de grupo dispuestos en media luna, tropiezas y lo disimulas hábilmente y al final llegas a donde está ella, sí, ahí frente tuyo, linda, tierna, radiante con su pantalón de las chicas superpoderosas y con un polito menudo y celeste, tanta conmoción hizo que olvides que primero se saluda a la mamá, luego al tío gruñón que a estas alturas ya se dio cuenta cuales son tus intenciones con respecto a su nena, luego a tu chica que te mira impaciente y al final a su hermanita que ya estudió la situación y ríe disimuladamente, como si supiera que estás a punto de arruinarlo todo; distraído y tratando de descifrar la sonrisa burlona de su hermana pequeña es a ella a quien saludas primero (error), luego a su mamá tratando de ser amable, luego torpemente a su tío que, seamos sinceros, a estas alturas ni te interesa, y al final la miras, y ella te mira, y entras en una burbuja, tanto que no puedes ni articular palabra y hay un silencio largo e incómodo, ella se empieza a desesperar y te pide en voz bajita, de favor, que digas algo. Acorralado solo atinas a decir Hola, podemos hablar? y te congelas. Ella acepta claro, por evitarte el mal rato y ella evitarse la vergüenza con su familia. Para eso, el tío ya te está clavando una mirada de asesino en serie y desea de todo corazón que el mequetrefe que regala peluches baratos, escribe cartas y trata de salir con su guapa sobrina reciba un escarmiento contundente, por ejemplo una mordedura de perro (de preferencia un rottweiler enorme, maloso y sin vacunar), o una escaldadura terrible que evite que puedas caminar unos cuantos días; pero a ti no te importa, ahora todos tus sentidos están puestos en ella y en lo que decidirá.
- Dime qué quieres Eusebio? (Ojo que usó tu segundo nombre, evidencia de que no existes para ella).
- Carlota hay que salir este sábado? Hay un nuevo parque a dos cuadras de mi casa que me gustaría visitar contigo...
- No sé, no creo que mi mamá me deje, es que ella no te conoce y no sé qué pensará.
- Inténtalo al menos, te llamo el viernes para confirmar, te parece?
- Haber lo intentaré, pero no ofrezco nada.
- Igual te llamo.
- Ok. Chau.
- Chau.
Llegó el sábado y despiertas con unas ojeras gigantes como las de un oso panda mal alimentado de algún circo japonés porque la noche anterior esperaste a que ella te devuelva la llamada hasta pasadas las 2 de la mañana, luego de la cuarta llamada tuya ya perdiste toda dignidad como para animarte por una quinta, y esperanzado aguardas paciente cerca al teléfono a que entre una llamada suya, que será la confirmación de la salida. Esa llamada obviamente jamás llegó. Ojeroso, trasnochado y decepcionado decides, de todas formas, ir a la cita. Crees -estúpidamente- que ella irá, así que pones todo de ti para estar lo más presentable posible en la tarde, además de eso le ruegas a mamá para que te haga una recarga al celular para que, según tú, estés comunicado con ella. El jueves de esa semana ella tuvo una conversación con sus amigas, que más o menos dictaba así:
- Chicas me invitaron a salir este sábado.
- Quién? Cuéntanos todo!
- Mmm, no recuerdo bien su nombre, pero creo que se llama Vladimir o Eusebio, pero es el chico que anda con José Carlos.
- Y quién es José Carlos?
- Ay! El zonzo que vive a la vuelta de casa.
- A si si, ya imaginamos la cara que puso cuando le dijiste que no.
- No, le dije que sí, es decir, le dije que posiblemente, no se me ocurrió ninguna excusa en ese momento, y además me dio mucha penita!
- Ay Carlota, que buena chica eres.
Vas emocionado sin saber que ella no te registra, incluso le preguntan por ti y no te ubica claramente, incluso no se acuerda muy bien de tu cara, nombre, aspecto, religión y demás; pero como eres el vil huevón de la historia, que todo lo soporta tienes la remota esperanza de que llegue a la cita. Imagínate lo que se dicen de ti, lo que sus amigas comentan, imagínate la vergüenza que sin saber te estas chantando.
Llegas temprano y te pones a esperar muy paciente la primera media hora, la segunda media hora estás más que ansioso pero decides no actuar y te repites constantemente que la paciencia es una virtud y no sé qué huevadas más. La tercera media hora ya estás a punto de colapsar y empiezas a reventarle el celular desesperado. Después de la timbrada número 23, y del segundo mensaje de texto que dice: "Te estoy esperando, ya vienes?" (que enviaste dos veces, por si el primero no llegó); ella te llama. Miras el celular con una alegría increíble, eres el dueño del mundo, el más afortunado de todos los afortunados en la fas de la tierra. Y en este punto hago una pausa y tengo que decir que las mujeres, a parte de estar todas muy locas, son malas; y tienen en su haber muchas excusas, miles, millones tal vez, para zafarse de este tipo de situaciones incómodas. Su locura les permite inventarse cualquier cojudez y romperte el corazón impunemente y sin reparo. Algunas son inteligentes, no dudo de eso; pero algunas insultan tu raciocinio, insultan incluso tu dignidad; y lastimosamente no te queda otra que aceptar. Voy enumerando para tenerlas claras, y dice así:
1. Una de las más clásicas es el resfriado, pero qué mediocre es esta excusa pero a la vez tremendamente efectiva, creo que esa característica hace que lo sea. Luego de contestarle el celular escuchas del otro lado una voz ronca que dice: "Discúlpame amigo, es que estoy muy mal, ni te imaginas, a las justas hablo". Tu cara de autogol es olímpica a estas alturas porque sin dudarlo eres consciente de que ella está fingiendo, y te miente con una naturalidad que te enfurece y te decepciona. Ella se disculpa y te cuelga.
2. Otra de las básicas tiene que ver con la familia, y echa tierra al que se le ocurra con algo como: "Discúlpame, es que mis padres no me dejan salir de casa, pero si quieres ven pídele permiso a mi papi porfis, es que si no, no me deja. De seguro te preguntará cuáles son tus intenciones, a dónde me llevas, a qué hora me traes, si es seguro el lugar a donde vamos, etc. Y si demoramos me mata" y sus criminales variantes como: "No puedo porque todos salieron y no tienen llave, pero si quieres ven a verme y conversamos en la puerta de mi casa un rato al menos" o "No puedo porque voy a salir con mi familia al campo" o "No puedo porque saldré de compras con mamá" o "No puedo porque estoy cuidando a mi abuelita o tía o sobrina" o "No puedo porque estoy en la casa de mi tía y qué pensará si salgo y la dejo" o "No puedo porque unos tíos vinieron de viaje de muy lejos y no nos visitan muy seguido". No jodan, en serio lo digo, no se pasen pues. Quién les va a creer algo de eso, admito que lo del permiso al padre es increíblemente inteligente y de todas maneras huyes porque ni en broma lo harías; pero lo demás, ¿no tienen llave? ¿qué pasó con sus llaves, se fueron a otra dimensión al fiel estilo de un caso Fringe? (para entender esta referencia tienen que haber visto la serie) y para colmo te invita a que vayas a verla y vive por el fin del mundo y tú eres el ser más misio de toda la galaxia y tu dramatismo alcanza límites insospechados y explotas. ¿Al campo? ¿en serio? ¿Tu madre no puede ir sola a comprar lo que necesite comprar? ¿es absolutamente necesario que la acompañes? ¿La abuelita o tía o sobrina? ¿eres enfermera o nana o algo de eso? ¿Qué carajos va a pensar tu tía si sales? ¿se va a decepcionar o va a pensar que eres una vaga sin futuro? Miles de preguntas sin responder, pero la de tus tíos si es el colmo, ese sí es un cuento de los grandes, quién en su sano juicio se va a quedar a conversar con personas a las que no ha visto durante toda su vida, y ellos la visitaron cuando era una bebé de meses, obviamente son desconocidos para ella. Qué huevada esto de la familia, en serio. No nos jodan así.
3. Otra de las más usadas es la del tortuoso examen, y el cuento va algo así: "No puedo porque tengo que estudiar mucho para un examen de un curso en el que voy mal, y pedí al profesor una recuperación y me dijo para este lunes y créeme, es muy importante para mí". Carajo, tienes sábado en la noche para estudiar, tienes domingo en la mañana, domingo en la tarde, domingo en la noche, incluso lunes antes del supuesto examen trucho. Es cuestión de organizarse pero no, la señorita quiere estudiar justo el sábado en la tarde, justo a la hora de la cita contigo. Cuento barato.
4. Otra de las más estúpidas excusas es la de los problemas de la "mejor amiga", y suena así: "No puedo porque mi mejor amiga tiene problemas en casa y tengo que apoyarla" y sus nefastas variantes como: "No puedo porque mi mejor amiga terminó con el novio" o "No puedo porque operaron a mi mejor amiga y tengo que ir a verla" o "No puedo porque mi mejor amiga tiene una fiesta en la noche y no tiene idea qué ponerse" o "No puedo porque a mi mejor amiga le salió un forúnculo enorme en la espalda y no alcanza a verlo con el espejo y tengo que ayudarla". El último fue inventado por mí, pero en esencia revela hasta qué punto son capaces de inmiscuir a alguien en sus mentiras. Además, seamos sinceros, quién no querría escuchar una excusa del tal calibre con respecto a su amiga, yo me burlaría terriblemente si me sueltan algo parecido.
5. Esta que viene es una de las más crueles excusas que existen y que lastimosamente un buen amigo mío sufrió en carne propia, este es un pequeño tributo a su sacrificado y dolido aporte a esta lista. Y va así: "Ah! No puedo porque justo ahora voy a salir con mi enamorado, pero normal, podemos salir los tres, ¿qué te parece?" Qué huevada. Con algo así matas de un solo golpe el corazón de cualquier persona. Y luego las dudas te inundan, porque según la responsable investigación que le hiciste, ella no tiene enamorado ni afanador ni fan ni pretendiente ni perro que le ladre en ese momento, dudas de tus fuentes, examinas en qué fallaste, qué se te escapó y luego llegas a la conclusión de que en realidad eso es un NO contundente y definitivo. Sé de muy buena fuente que esta es muy utilizada por las mujeres porque les da la seguridad de que el acoso termina en la primera estocada, sin medir consecuencias, de favor, no lo hagan, dejan al corazón perplejo y paralizado.
6. Esta que viene es una de las más divertidas que he podido escuchar, suena así: "No puedo porque estoy en mis días", pero como tú eres un tremendo mongo sin remedio no entiendes absolutamente nada y le preguntas a qué días se refiere, y ella responde (luego de un suspiro que evidencia que eres un tarado): "Con mi regla pues, tengo cólicos terribles y además estoy con un carácter de miércoles". Y luego de entender y sufrir cierta incomodidad por el asunto cuelgas desairado. (Estoy seguro que Tebi diría que bacán, mejor así para que si pasa algo más -por más grotesco que sea- no se corre ningún riesgo, un choque y fuga sin compromiso ni peligro de embarazo). Buen movimiento chicas, lo digo en serio.
7. Esta también es una de las más divertidas y extrafalarias que he escuchado en mi vida, pero créanme que hay gente que la usa y peor, hay retrasados que la pasan como cierta, ahí va: "No puedo porque mi horóscopo me ha dicho que no salga hoy y tengo miedo". No me recontra jodan, esta si es un insulto a tu coeficiente intelectual y te bautiza como el más pavo de todos los pavos del lugar. Debo aceptar que no he parado de reí cuando me la contaron, además, me soltaron el nombre de la persona que la creyó y me reí mucho más porque, según él, es el más iluminado de todos los iluminados.
8. Esta es una de las más clásicas también, pero muy usadas y también efectivas, va así: "No puedo porque tengo una reunión muy importante con mi promoción de escuela o colegio o universidad o barrio o trabajo o juerga" y generalmente va acompañada de un sustento medio cojudo, algo así como: "Es que una está embarazada, o uno se va a vivir a otra ciudad, o una se va al extranjero, o a uno le diagnosticaron algo, o una perdió a alguien importante, o uno tuvo un accidente, etc etc etc". Infinitos etc para infinitas mentiras. Chicos no crean estas huevadas por favor.
9. Esta también es muy cómica, pero sé de pocas mujeres que la utilizan porque de cierta manera quedan expuestas, pero hay locas muy locas que sueltan las cosas y les llega todo, incluso dando detalles medios embarazosos, esta suena así: "No puedo porque se me aflojó el estómago y estoy prácticamente prisionera del baño, no puedo hacer nada, voy 15 veces al día y esto ya me está desesperando, no sé que hacer y es imposible que salga así a la calle". Ojo que para utilizar esta tiene que haber cierto grado de confianza y nada de pudor, absolutamente nada.
10. La que viene creo que es una ofensa para todos nosotros, va: "No puedo porque tengo que ver mi novela ya que está en la parte más interesante, en donde José Roberto está en depresión porque encontró a Jimena Eugenia con su mejor amigo haciendo compras, pero lo que no sabe es que su mejor amigo es gay y se está revolcando con su casero, y José Roberto va a pedir explicaciones con prepotencia, incluso con violencia, y tanto el amigo como Jimena Eugenia se van a enojar con él por armar tremendo show en plena calle, y no puedo perderme este capítulo, además luego pasarán el especial de todo lo que pasó en la semana y esto es imperdible, lo siento". Como ya lo dije, esto es un insulto de lo más vil y cojudo.
11. Esta es una clásica también, va así: "No pude porque me quedé dormida y ni sentí la hora, desperté muy tarde sin darme cuenta". Reaccionas y le dices que le timbraste mil veces al cel, a lo que ella contesta: "Sí, pero lo puse en vibrador para poder conciliar el sueño, y al despertar vi tus llamadas". ¿Qué te queda en este punto?
12. Esta es muy usada también, suena así: "No puedo porque tengo que ir a cortarme el cabello y demoraré toda la tarde". En algunos casos ya no podemos comentar nada, solo tragarnos la decepción y la rabia.
13. Esta suena así: "No puedo porque tengo que ir a la iglesia". Y el nivel de credibilidad de esta excusa va muy acorde al nivel de religiosidad de la chica, hay varias a las que si les va esto de ir a la iglesia, pero hay otras que son tremendas demonias y el simple hecho de pisar un lugar santo hará que se incendien y ardan hasta quedar en cenizas.
14. Esta excusa también es muy usada, va: "No puedo porque mi perrito está enfermo y tengo que llevarlo al veterinario". Un amigo cercano sufrió esta y al final me dijo que lo más decepcionante fue que la flaca era veterinaria, definitivamente el cinismo de algunas personas no tiene límites.
15. Esta es la más cojuda de todas: "No puedo porque tengo que limpiar mi casa". No jodan, no conozco a ninguna mujer que le guste limpiar su casa, mentira gigante.
16. Mensaje furtivo diciendo: "No puedo, sorry, después te lo explico". Ten por seguro que jamás llegará la explicación.
17. La del celular apagado porque su batería murió y no tenía el cargador cerca.
18. Y también está la que es criminalmente sincera y suelta algo así: "No pienso salir contigo, no me pareces en absoluto interesante". Es decir, soy mucha patada para tu pelotita.
Nota mental: Post con el que siento que hago un bien a la humanidad, y presto servicio a la comunidad. Opino que los hombres tenemos que estar prevenidos a la locura de las mujeres. Y ojo, esta no es una lista ilustrativa chicas, por favor no usar como manifiesto ni ayuda para zafar, esta lista esta hecha para nosotros, los hombres que sufrimos por cada huevada que nos dicen.
PD1.: Te sentirás seguro y dormirás sin sueños...
PD3.: Yo no sé vivir sin ti.
PD4.: Si me lo pidieras te daría el sol.
PD5.: Ya no somos los de antes.
PD6.: A veces la gente te eleva, te guste o no.
PD7.: Impresiona mirar atrás.
PD8.: Cuentos a patadas...
PD9.: No hablo de ti cuando escribo. Hablo de mí que estoy muy lejos.
PD10.: En un minuto hay muchos días.
PD11.: No sé, pero si algo fue escrito distraídamente es este poema.
Después de beberme unas tazas de café cerca de mi ventana, decidí volar
y relajarme, para aquel entonces estaba perdido en un amor que no tenía
sentimientos, era un amor bastante dañino, la única salida que tuve en aquel
momento fue encerrarme en mi cuarto y anotar cada cosa que se me ocurría.
Disparates llenos de decepción.
