viernes, 19 de septiembre de 2025

Los límites de lo visible

        No vemos el mundo como es, sino como nuestra época nos permite verlo”.

— Michel Foucault, Las palabras y las cosas

Foucault escribió esa frase en 1966, cuando la inteligencia artificial era apenas un concepto de laboratorio. Y, sin embargo, hoy resuena como si la hubiera dicho ayer.

Su advertencia no era técnica, sino ontológica: no hay mirada que no esté moldeada por un tiempo, un lenguaje, una estructura de poder. Cada época define lo que puede ser dicho, pensado, visto. Todo lo demás —lo impensable, lo inefable— permanece fuera de foco.

La modernidad creyó romper con esos límites. La ciencia, la razón y la técnica parecían abrir el mundo a una transparencia infinita. Pero Foucault ya intuía la paradoja: cuanto más creemos ver, más estrecho se vuelve el marco. Y ahora, en pleno siglo XXI, ese marco tiene nombre y dirección IP.

La inteligencia artificial no nos muestra el mundo: nos lo traduce. Clasifica, predice, corrige. Nos devuelve versiones de la realidad según los patrones que extrae de nosotros mismos. Es el nuevo régimen de visibilidad: los algoritmos no censuran, filtran; no prohíben, priorizan; no juzgan, ponderan. Y en esa aparente neutralidad se oculta un poder más sutil que cualquier dogma.

No se trata de temerle a la máquina, sino de reconocer en ella el espejo de nuestra época. Porque si Foucault tenía razón, no hay una verdad fuera del marco que la define. La IA es la gramática contemporánea de lo real, un dispositivo que decide qué merece aparecer y qué se hunde en el ruido.

Vivimos rodeados de visibilidad y, sin embargo, cada vez vemos menos.

El mundo se ilumina por pantallas, pero lo invisible se ha vuelto más profundo.

La inteligencia artificial no ha abolido los límites del saber: los ha refinado. Y quizá nuestro desafío no sea huir de ella, sino recordar que siempre hubo mediaciones, que la mirada nunca fue inocente, que incluso en el algoritmo persiste la vieja pregunta foucaultiana:

¿Quién decide hoy qué es visible y qué queda fuera del campo de visión?

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