lunes, 10 de marzo de 2008

Cansado

Son las 11:48 pm., tal vez cuando termine de crear este post ya se haya acabado este día. Me percato de un pequeño pero fastidioso dolor de cabeza y me pregunto el porqué se da, esperando una autorespuesta: mucho tiempo en la computadora, tratando de aplacar mi hambre a la información, eso último a parte de sonar algo embustero sonó como a intelectualón, rectifico: sería aplacar mi hambre al entretenimiento de la mejor forma que la se hacer -a parte de la guitarra claro- sería leer y reírme, dos cosas que llegaron indistintamente a mi vida y al hacer esa fusión logro congelar mi hiperactividad por un momento y me enfrasco en una burbuja, mi burbuja, mi pequeño espacio, increíble para algunos e indiferente para otros.

Antes de seguir desviándome del tema que quise tratar, explicaré la circunstancia que me llevó a hacer esta crónica y las que posiblemente sigan después de esta, esperando sinceramente que al postearlo no logre atraer problemas a mi ya agitada vida, o en todo caso perder amigos ni nada de eso. Una mañana en la universidad, después de una larga clase iniciada las 7 de la mañana, tal vez por esa razón veo algunas caras demacradas y soñolientas, recordamos un sobrenombre que a parte de habernos hecho cagarnos de risa, quedó automáticamente inscrito en recién empezado libro en el que se escriben -redundancia tonta, pero detectada- las tonterías hechas o sufridas por los tácitos protagonistas: Nosotros.

Todo esto empezará muy pronto, disculpandome por no iniciarla hoy, pues sinceramente estoy cansado, y aún más cansado -tal vez HARTO- por estar siempre cansado. Si alguien entiende lo que trato de decir, por favor, que lo explique a los demás que quieran entender, aun yo no lo quiero hacer.

No hay comentarios: