Haré algo resumido y fácil de entender, sí, con poco verso, por supuesto más entendible. Digamos que ya me conocen, que quizá soy un libro que conocieron ayer, lo abrieron y encontraron una oración, y la cual ya era fácil de entender. Quizá eso me hizo un poco sencillo, pero conforme crezco mis expectativas de saber más de mi me parecen más complejo -crecer me refiero a crecer en mi edad- mi sinfonía elemental de mi silencio marca eso, mi pensar en mi o quizá mi hábil imaginación de mi futuro de "cómo me imagino seré" si pasa algo, o también mi pasado con "...si hubiera hecho esto...", en fin un sinnúmero de estrategias para esperar lo que quisiera escuchar y repetir intencionalmente un error marcado en el pasado.
Haré también un resumen de algo que no soy de soler escribir, de ciertas circunstancias vividas, que valga decir, no tienen nada de interesantes. Mas es la primera vez que trato de presentarme, puesto que he vivido como un ermitaño, que salgo de mi cueva de manera casual, y a la vez, intencionada para dejarme conocer.
Y empezaré diciendo que haré lo que pensé cuando me vi en el espejo...cerraré más mi ojo izquierdo, para que quizá se empareje con mi otro ojo, pues me parece más abierto que el otro; esto me trajo a la mente, pero no de forma fugaz sino que demoró digerir mi cerebro, así como me demora mi sistema digestivo, que superficial nos vuelve el mundo; no sé desde cuándo tenga el ojo abierto, desde mi parálisis o derrepente siempre lo tuve. Lo que sé es que mis sentidos me perciben actualmente y veo también que mi futuro es una forma compleja de lo que piensa un niño, de cuando era niño, y esto no me hace superficial sino me hace más complejo; pues no entiendo cuándo y cómo me hice más superficial...
Carlos Calderón.Gracias camarada.